Fenwick Iribarren: “Habría que liberalizar más suelo y a coste cero para poder construir más viviendas sociales”

¿Qué se siente al ganar un proyecto para una Expo por otro país, imponiéndose al propio?

Mark Fenwick: Pues tenemos el corazón dividido. Ha sido una batalla de seis meses, aunque llevamos cuatro años diseñando el estadio; aun así, el verdadero desafío viene a partir de ahora. Serbia tiene uno de los PIB más altos de Europa y están encantados. De nuevo ha triunfado el factor de “la sostenibilidad”, como en el Estadio del 974, porque todos los pabellones se van a reutilizar.

Éste y otros proyectos suyos están diseñados bajo la filosofía que ustedes mismos bautizaron con el nombre de “Blue Architecture”. ¿Pueden explicarnos en qué consiste exactamente este concepto y cómo se les ocurrió?

Marck Fenwick: En 2008, cuando empezamos a salir al extranjero, nos empezaron a pedir que todo fuera “green”, asociado a la energía, lo sostenible, todo enfocado a cuidar el planeta… Y nos dimos cuenta de que todo el mundo se había olvidado de las personas. Y un planeta habitado es azul y no verde, así que creamos y establecimos una serie de estándares o criterios relacionados con la sostenibilidad, pero enfocada a las personas: el sentido, los colores, los espacios adaptados a cada tipo de personas, por ejemplo, la cultura, cuando se diseña un espacio, es fundamental pensar bien de qué cultura proviene o tienen las personas que lo van a habitar.

Javier Iribarren: Se trata de priorizar el bienestar de los usuarios de dichas edificaciones y humanizar las estancias, conseguir que las personas se sientan bien y a gusto en los espacios que se crean. El diseño, a su vez, prima la sostenibilidad y eficiencia energética del recinto.

Así que imagino que entonces les gustarán los nuevos edificios y entornos de ‘coliving’ que se están empezando a construir, por ejemplo para los senior…

Javier Iribarren: Sí, por supuesto, nos parecen propuestas muy interesantes. Nosotros, por ejemplo, hicimos un hotel en Madrid pensado para jóvenes emprendedores, el Hotel Social Hub, y precisamente por ir destinado a ese público, diseñamos un entorno innovador muy divertido, con mucho colorido…

Mark Fenwick: Tener lugares donde los mayores de 70, por ejemplo, puedan relacionarse con otras personas de la misma edad e intereses comunes es algo muy interesante… Lo que son terribles son las residencias, salvo en casos extremos de mayores que necesiten mucha atención y sean muy dependientes. Aún así son conceptos que están por desarrollar en España.

¿En qué proyectos están trabajando ahora?

Javier Iribarren: Nos estamos abriendo mercado en Arabia Saudí, en Malasia, en Méjico y en Marruecos…

¿Y en España?

Javier Iribarren: Sí, en España estamos en el concurso del Estadio del Betis, que ya quedamos entre las siete candidaturas finalistas. También acabamos de entregar el nuevo Campus y Sede de Acciona en Madrid, en la calle Mesena, todo bajo el concepto ‘blue architecture’. También hemos acabado las oficinas de la nueva sede en España de L’Oreal, en la calle Alcalá 546. El edificio de oficinas de Merlin Properties se acabará este año, y estamos acabando los estadios del Valencia y el Valladolid.

¿De qué proyectos se sienten más orgullosos?

Mark Fenwick: Pues del Estadio 974 y de la torre Caleido, porque son dos proyectos pioneros en el mundo, cada cual en su categoría: el primero por ser el primer estadio desmontable del mundo, y el segundo, la primera universidad vertical del mundo. Es cierto que para nosotros, tener tres estadios en un Mundial ya fue un reto increíble y marcó un antes y un después en nuestra trayectoria.

Javier Iribarren: Cada proyecto es un reto. Piensa que diseñar y hacer un Estadio puede tener la envergadura de hacer una catedral, y antaño hacían una en la vida y llevamos muchos, y los que nos quedan. Son obras enormes y muy complejas.

¿Y hacia dónde creen que se dirige la arquitectura en la actualidad?

Mark Fenwick: En España hay buenos arquitectos y creemos que se está haciendo buena arquitectura. Hoy en día, lo bueno vende y esto empieza a ser cada vez más valorado por las promotoras, que les empieza a gustar que se las asocie a una marca o a un Estudio concreto, como símbolo de calidad. El cliente final también busca y valora cada vez más la calidad.

¿Creen que la Inteligencia Artificial (IA) lo va a cambiar todo a corto plazo, también en el ámbito de la arquitectura y en la configuración de las ciudades?

Mark Fenwick: La IA es buena si sabe usarse de manera adecuada, como el móvil, que es una buena herramienta, pero si se utiliza de manera controlada. El problema está en saber dónde está el límite entre lo que es de verdad y lo que no, porque hoy en día no se chequea casi nada.

¿En qué creen que ha cambiado más nuestro concepto de la vivienda tras la pandemia?

Javier Iribarren: Pues creemos que, sobre todo, en que la vivienda debe ser también un espacio de trabajo; también ha cambiado mucho el concepto de las terrazas y los espacios exteriores, que ahora se valoran más que nunca, pero que es una pena porque en España se penalizan, porque forman parte de la edificabilidad y no deberían computar como metro cuadrado construido.

Mark Fenwick: Hay que crear espacios con zonas comunes, adaptar las viviendas a las características de determinados colectivos, según sus necesidades e intereses, etc.. Pero se siguen creando viviendas enfocadas a familias “estándar”, como si no hubiera hoy en día una enorme tipología de familias.

¿Cree que vamos hacia la industrialización modular en la construcción de viviendas?

Javier Iribarren: Sí, creo que va a ir por ahí, para que sea más fácil crear viviendas adaptadas y flexibles, con distintos espacios para los diferentes tipos de familias o situaciones particulares…

¿Cuál cree que es el principal problema de la vivienda en España?

Mark Fenwick: El problema fundamental es el suelo, y no porque no haya, sino porque no se liberaliza y el que hay es muy caro. La mitad del coste de un edificio de viviendas es el suelo. Habría que liberalizar más suelo y a coste cero para poder construir viviendas sociales.

Además, el proceso de urbanizar suelo en nuestro país es eterno.

Javier Iribarren: Sería importante también fomentar de alguna manera que la gente viviera fuera, en el extrarradio de las grandes ciudades, y así podría estar más en contacto con la naturaleza, potenciar y facilitar más el teletrabajo… para que no se concentre tanta gente viviendo y demandando viviendas en el centro de las principales ciudades.

 

** Entrevista publicada en Idealista News.

 * Si quieres reproducir parte de este artículo o enlazarlo, estaré encantada de que lo hagas, pero por favor: ¡menciona la fuente y el link al mismo! ;-). La autoría de las fotos de sus obras y trabajos son todas cedidas por Fenwick Iribarren Architects (FIA).

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BEATRIZ ARROYO, de Ponle Alma a Tu Casa.